LA FRASE

"¿La diferencia entre Erótico y Pornográfico? erótico es usar un pluma; pornografía es usar la gallina entera..."
Robin Williams, en Weapons of Self Destruction

martes, 20 de mayo de 2008

Kiosco del negro (parte V)

MAR NEGRO:

Si bien las reuniones en el kiosco se dan a cualquier hora con tal de q haya quórum, y se discute sobre cualquier tema, saltando de uno a otro indistintamente, hablándolos al mismo tiempo, o en forma de subgrupos dentro del grupo ppal, existió en una época no muy distante a la de mi llegada, pero si anterior, un ritual realizado una vez a la semana entre un grupo determinado de “Gente del Kiosco”[1]. El ritual se llamaba “Mar Negro” y se llevaba a cabo todos los miércoles a la noche desde la hora de las brujas. El nombre de esta tertulia especial deriva de la conjunción del nombre de un programa de TV q se proyectaba a la misma hora q la reunión mas el nombre del kiosco. Así, “Mar de Fondo” + “Kiosco del Negro”, se transformaron en “Mar Negro”.

El programa de TV para aquellos no entendidos en el tema, se desarrollaba en un estudio con forma de vereda de barrio en la q se reunían los conductores mas invitados especiales (generalmente deportistas) y comenzaban una especie de “charla entre amigos” relatando anécdotas y vivencias pasadas, q son tan añoradas en determinada época de nuestras vidas.

La reunión transcurría de la misma forma, un grupo de amigos q se reunían para contar anécdotas, pero con la salvedad de ser cada miércoles dedicado a un tema especial. Son muy recordadas por la calidad y cantidad de los recuerdos temas tales como “el mejor gol de tu vida”; “antiguas novias”; "aquella vez que pesqué una tararira"; "El mejor lugar para jugar a las escondidas"; etc.

La reunión se acababa cuando se cerraba el kiosco, o mejor dicho, se cerraba el kiosco cuando se acababan las anécdotas.

Mientras se relataban estas vivencias, el elixir inspirador por excelencia pasaba de mano en mano, y el Programa de TV era proyectado en el televisor, pero en “mute” o sea sin sonido, para no distraer a los participantes.

Se ha llegado a odiar de por vida a algún ocasional cliente q ha entrado justo cuando se estaba por convertir el gol o estaba gestándose el primer beso.




[1] No por ser exclusiva esta reunión, sino porque los únicos q había disponibles al momento de realizarse eran siempre los mismos.

No hay comentarios: