Vendedor de almas

"El trato es así pibe: vos mirás tu futuro por un rato, así sabes cuales van a ser tus errores, y después me das tu alma". Así, de una, se lo ofreció el viejo que estaba sentado a su lado a Pablo.
Yo lo miré y dije: “tomatelas viejo borracho, falta que te llene la cara de dedos”. Nunca le había pegado a nadie, pero le gustaba de vez en cuando decir eso…
El viejo volvió a insistir: en serio pibe, soy un enviado del diablo, si vos me vendes tu alma, yo recupero la mía, el diablo me la quito hace tiempo, me engañó pibe… por favor, tengo esposa e hijos, quiero estar con ellos una vez mas, ni que sea unos minutos.
El viejo efectivamente le había dado su alma al diablo, de la forma más estupida, la vendió por un par de sietes en un juego de dados. Los sietes no salieron, por supuesto, ni el diablo maneja el azar de los dados!...eso es cosa de gente seria!... así que el viejo por no saber esa pequeña triquiñuela, perdió su alma…Se canso de rogarle al diablo que se la devuelva, que había sido engañado. Incluso llegó a amenazarlo con iniciarle acciones legales, pero quien mierda le iba a creer semejante historia!...así que el viejo no tuvo mas remedio que aceptar lo que el diablo le ofrece a los boludos que agarra de la manera fácil: conseguime un alma y te doy la tuya. Lo que no saben estos pobres diablos es que el alma que te devuelven, está desgastada, cansada de recibir los castigos que propina el diablo, y no tiene mas ganas de vivir…la mayoría de estas almas se suicida, llevándose consigo el cuerpo que la protege. Por un momento, después de cómo quince minutos de ignorar al viejo, sentí que debía escucharlo, que pelotudo!.
El viejo me dijo que tenia familia y que no la podía disfrutar, no sentía nada, no podía disfrutar de un mate cebado por su mujer, no podía disfrutar de los juegos con sus hijos, no podía sentir nada por su familia. Ahora sí, si se trataba de joda, ahí si le corría la sangre por las venas de nuevo, se cansaba de disfrutar cada whisky como el ultimo, cada dado tirado como el ultimo, cada polvo con una puta como si fuera la primera vez… Justo ahí empecé a escucharlo! Y me dijo que extrañaba a su familia y que se yo…
Yo desde Clara nunca más sentí nada por una mina. Vivía con lo puesto, malgastando lo poco que ganaba en putas y alcohol, justo lo único que el viejo disfrutaba!... Todavía recuerdo el día en el que le dije a Clara que no la quería mas. Era jueves, desde ahí todos los jueves fueron siempre cobardes, tristes, odiosos, los de las curdas más terribles… Ese jueves me levanté con el pie izquierdo, me di cuenta que no me gustaba lo que estudiaba, no quería estar mas con ninguna pareja, y que no se me acerquen mis amigos… así de simple. No hay noche que no me arrepienta de esa decisión. Me fui a la casa de Clara y le dije: “no quiero verte la cara nunca mas en tu puta vida”. Así de simple. Sin razón aparente. Dejé mis estudios, encontré un trabajo mediocre, pero que me permitía bancarme solo, y deje de frecuentar a mis amigos. Salía sólo, bares de mala muerte, a tomar toda la noche. Así empecé mi nueva vida.
Hacia dos meses que salíamos con Clara. Ella era muy linda, piola, y teníamos las mismas ideas; pero el día anterior habíamos tenido nuestra primera discusión seria, y no me había gustado nada el tono de nuestras voces, así que pensé: “si en dos meses hablamos así, en tres años nos ponemos estricnina en la comida”. Esa fue la simple razón.
El viejo seguía hablando, rogándome…yo ya no escuchaba. Pensaba en ese día en que la vi con otro tipo. Se me cayó la estantería. Todo mi pasado, y mi presente me pegaron semejante cachetada que quedé sentado en un banco de plaza… Ella estaba tan hermosa. El loco no se parecía en nada a mi, creo que entendió bien eso de no tropezar dos veces con la misma piedra. Era muy inteligente ella. Para colmo fue un jueves también. Ese día terminé en cana después de romper el espejo de detrás de la barra de un bar, porque no me quería ver en él. No quería ver la mierda que estaba hecho.
De pronto escucho algo que dice el viejo: “tu pasado no te condenará mas, si no sentís, no tenes culpa de tus errores, y vivís contento”. Me empezó a gustar la idea. Pedazo de gil.
Después de Clara nunca tuve una relación en la que no tenga que pagar, o que dure mas de 2 horas. Pensaba que todo eso se podía borrar, ya no sentiría esa punzada en el corazón por Clara, ya me chuparía un huevo todo!. Pero no podía ser eso, el diablo y Dios no existen. Esto es un invento de los hombres mismos para convencerse de que no morirán, reencarnaran, o iran al cielo, y todas esas ganzadas de la religión. Y lo del diablo es otra pelotudez para seguir las pautas morales que se engarzan en la sociedad, para que todos nos portemos bien y no hagamos cagadas.
Entonces le dije al viejo, mas por convencerme a mi que por otra cosa, que me mostrara como funcionaba eso. El viejo no lo podía creer. Se le iluminaron los ojos como si fuese un chico de 7 años con bicicleta nueva. Empezó a tartamudear, se acomodaba en la banqueta queriéndome explicar algo, pero no le salían las palabras. Pidió otra ronda para los dos como para calmarse, y cuando el mozo trajo los whiskies empezó. Mira pibe es así: vos miras en tu vaso tu futuro por unos segundos, te tomas el vaso de un saque y ya está. Tu alma pasa al diablo, el me da la mía, y todo solucionado!.
Para, para, dije yo, tan rápido no, convenceme. Vendeme el paquete diabólico le dije riéndome, como quien le toma el pelo a alguien.
Fácil nene, no vas a sentir culpa para nada, de nada ni nadie, podes hacer lo que se te cante sin tener remordimientos, es como si le pusieran una cinta en la boca a la puta conciencia, y listo!.
¿Y por qué no seguís si no sentís nada?, dije yo. Mira nene, vos no tenes familia, ni creo que vayas a saber lo que es tener una, así que no te voy a poder explicar eso. Yo lo necesito ahora, me estoy por morir, soy viejo, y no he podido disfrutar a mis hijos, a mis nietos.
¿Y cuanto hace que estas con esto viejo?. Y como 30 años pibe. A parte si te cansas solo tenés que encontrar otro pibe como vos que haga trato y listo. Todo en este mundo tiene solución, porqué no la venta de almas al Diablo…jajaja. La sonrisa del viejo era desdibujada, de alguien que había sufrido mucho, y se daba cuenta de ello.
Lo pensé un rato. Calculé las buenas y malas de encintar a la conciencia, calculé que era cierto, que no tendría nunca una familia, es más, pensaba morirme joven de cirrosis o algo, de la manera en que tomaba!.
Pero no me satisfacía el hecho de mirar mi futuro, sabría mis errores, y no tendría gracia nada. Algo estaba mal en el paquete que me vendía el viejo. Entonces le dije: “no viejo, vendeme otro paquete, ese no me gusta.”
El viejo se puso pálido, medio enojado, medio frustrado, comenzó a tartamudear de nuevo, balbuceaba algo que no entendía bien. De pronto miró el espejo de detrás de la barra y comenzó a hablar con él mismo. Al rato me dijo: está bien pibe, ¿que querés?. Me dieron permiso de arriba para ofrecerte lo que quieras a cambio de tu alma, pasa que yo ya no sirvo, me estoy por morir, estoy viejo, soy como un vendedor que no vende ¿viste?. No sirvo, entonces me aceptan cualquier paquete que les mande. Vos sos mas joven, tenes cara de chamuyero, vas a andar bien cuando quieras conseguir vendedor de alma.
Me puse a pensar que quería. La mejor pregunta en el mejor momento. Que quería. Pensé en fama, mujeres, dinero, autos caros, más mujeres. Ya está, me dije. Pedí guita boludo, el resto viene solo. Pedí ser alguno de esos abogados de los famosos que se llenan de guita. O algún tipo de empresario.
De repente: Clara. Sentí ganas de estar nuevamente con ella. Como aquella vez hace 2 años, cuando averigüé donde vivía y me fui crudito, medio borracho a pedirle que vuelva. Pibe vos estas loco, me dijo. ¿Quien te crees que sos para venir a mi casa a decirme esto, después de cómo te despediste?. Tomatelas y no aparezcas mas en toda mi puta vida.
Me pagó de la misma forma. Corte de rostro y cierre de puerta. Todo al unísono. Que hermosa estaba toda así enojada. Siempre le salía todo bien, hasta cortarme el rostro. La odié por un rato. Pero después la volví a amar. No podía odiarla si tenía razón. La busque un tiempo mas pero siempre me cortó el rostro. Después la busque en otras, pero no fue lo mismo. No había otra, ni parecida.
Entonces me decidí. Quería a Clara, quería mi felicidad, mi vida, mi corazón, mi media naranja, mi compañera, mi todo. Estaba dispuesto a todo por tenerla nuevamente, incluso vender mi alma al diablo. Y así lo hice. Le dije al viejo que la quería conmigo nuevamente, me tomé el trago de una. El viejo dijo, gracias pibe, y todo se tornó confuso, me maree, todo se movía, se puso borroso, y de repente todo oscuro.
Aaahhh!!!!!!!!!!! Grité. No podía ver. De pronto una luz se enciende a mi costado y una voz me pregunta: ¿qué pasó amor?... me quedé como estatua, no entendía nada. Estaba en una pieza bien decorada, en una cama doble y con alguien al lado. Miro lentamente hacia mi izquierda, de donde provenía la voz. Y allí estaba ella. Con el pelo enrulado, mirándome, preocupada. Tenes fiebre amor, capaz que una pesadilla de nuevo. Dejame ir a buscarte un paño frío y un poco de agua. La miré fijo un segundo, pará, dije. La contemplé de nuevo, fui feliz. No podía ser me dije, está a mi lado Clara, la única que amé en mi vida, a mi lado. Todo por un alma. Alto precio tuve que pagar, pero podía recuperarla. No podía ser más feliz.
La besé, con toda mi vida la besé. Como si fuera la última vez la besé. Ella se levantó y fue a buscarme agua, al son que me decía “¿q te pasa?, estas medio delirado…”. Me quedé absorto mirando como se alejaba por la puerta, miraba su sombra en la pared, su camisón de seda, negro.
Pero de repente algo anduvo mal, muy mal. No disfrute ese instante… algo pasó, algo no me dejó apreciar ese momento, atesorarlo en mí para siempre. No lo sentí.
“¡No lo sentí!”, flor de pelotudo me dije, claro, si no sentís nada… te olvidaste de eso, tantas ganas de ella te hicieron perder el juicio, y olvidaste que no ibas a sentir!!.
No puede ser me dije…el beso, eso si creo haberlo sentido. Me baje de la cama, corrí a la cocina donde ella estaba, la besé en la boca con toda mi alma…pero no tenia alma, entonces no pude sentir esa punzada tibia en el corazón, esa que te indica que estás amando, que estás sintiendo…
Desde ese día ando buscando vendedor. Ella me dejó, me dijo que no sentía nada por ella…que no notaba el fuego de otrora en mis besos, que la pasión era solo una palabra en mí.
Yo no pude explicarle lo que me había pasado, no me creería.
Desde ese día ando buscando vendedor, tratando de volver a sentir, y esperando el momento de encontrarla para volver a besarla; le sigo la vida desde las sombras. Se que está con alguien, pero se que no me olvidará…nadie olvida nunca, solo dejan de recordar.

El viejo se murió a los 2 días…