En los estertores de aquella lucha, el viejo miraba, cansado, los restos de aquel naufragio. No le quedaba nada por perder, excepto la vida...la esperanza la habia dado cuando comenzó aquella tormenta que lo derivaría, sólo, perdido, sin medios de subsistencia, y desalmado a la isla de uno mismo.
Harto luchador de tantas batallas, hoy caía derrotado por varios enemigos, pero derrotado al fin. El miedo le ganaba las manos que comenzaban a parecer electrocutadas; los pies eran de plomo puro y duro, no se podia mover; los ojos, cataratas; el alma había perdido un mundial en el ultimo minuto y le dolia como mil martillazos; el corazón, el corazón era el único que la peleaba, el único que seguía con vida en ese cuerpo...corazón incansable, motor de todas las peleas de la vida; muy amante de sí mismo, orgulloso, romántico, libre, excéntrico, desgraciado...caía fulminado en ese dominó de piezas que se dejaban golpear, en ese roble que cedía por el peso de los años, en esa pieza que ya no queria bailar...
No van a poder decir que no la pelee-dijo el viejo- es que ya no tenía ganas de seguir viendo la misma mentira...el amor, el amor es ese callejon sin salida con el que nos chocamos por ir tan rapido en la vida, por no detenernos...la mayoria de las veces sabemos que está perdida la batalla, pero es él quien nos lleva a empuñar la espada, una vez mas...
Deliraba el viejo con la mirada apuntando al suelo, entregaba las armas, bandera blanca de por medio y cedía frente al enemigo...
Serio, el enemigo lo tomaba en sus manos y lo cuidaba de aquel viento cruel, el de la derrota. Lo llevaba de las manos rumbo a la prisión, caminando despacio para dejarlo contemplar lo que quedaba de libertad. Le ofreció un pucho y un chocolate, últimos deseos de la libertad que se extinguía, pero el viejo no los aceptó. No porque fuera mal perdedor, simplemente porque no fumaba y el chocolate no era su fuerte...ahhh si hubiese sido whisky...
El viejo se sentó, con la frente en alto como toda su vida, acomodó sus ropas, se peinó, miró al cielo, y dijo: deale compañero, que no quiero viajar tan de noche...
El tiro le dio justo entre las cejas, abriendole un tercer ojo por arriba de los otros dos...una lastima, era pintón el viejo de cara, lo podrían haber guardado en formol como a los otros...pero era mucho peligro mantener esa imagen como viva...
El cuerpo se paseó en la parte de atrás de una Ford 100 modelo ´86 por tres días por todo el centro, querían asegurarse que el populacho supiera que el viejo habia muerto...
Yo estaba tomando un mate afuera cuando vi pasar la F-100, miré el cuerpo desvencijado sentado en la mismísima silla en que lo habían matado, todavia las manos atadas y EL pareció mirarme, pareció como que sus ojos se levantaran y me miraran a mi, sentí fuego, hielo, amor, odio, paz; olía a azufre con perfume de jazmines, y algo en mí nació...
El piedrazo fue directo al vidrio de la F-100, todos estallaron en gozo y al mismo tiempo en furia...la calle era fuego, el fuego era bronca, la bronca eran manos que rompían la camioneta y desgarraban a los paseadores del viejo...La venganza se consumaría, EL viejo viviría en todos nosotros por siempre...Ese fuego no se apagaría.
LA FRASE
"¿La diferencia entre Erótico y Pornográfico? erótico es usar un pluma; pornografía es usar la gallina entera..."Robin Williams, en Weapons of Self Destruction
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